Se reedita "La sencillez del saber estar"

Los buenos modales y la educación son las bases para saber comportarse en público, en una reunión de negocios o entre amigos y familiares. Después de once años en el mercado, “La sencillez del saber estar” de Carla Royo-Villanova se revisa y se reedita por Martínez Roca. La autora ha estado en La Tarde con Cristina para contar algunas de las anécdotas que contiene el libro.
Carla Royo-Villanova es directora de Comunicación de Pedro del Hierro, de Imagen y Comunicación de Trash and Soul y de Marketing de RC Bulgaria Management. Su experiencia la plasmó en 1999 en “La sencillez del saber estar” y ahora vuelve a reeditarse en Martínez Roca.

En la entrevista mantenida en La Tarde con Cristina, Royo-Villanova ha comentado que es “un libro de lectura ágil, rápida, entretenido, contado en primera persona, porque no quiero dictar sentencia -esta es mi manera de hacer las cosas y a mí no me ha ido mal-, por eso tiene muchas anécdotas, se ven de una manera más fácil y con muchas anécdotas que te hace sonreír”.

En “La sencillez del saber estar” no solo muestra, como dice ella, ‘su manera de hacer las cosas’, sino también parte de su filosofía. Frases que nos ha dejado en COPE como “no le hagas lo que no te gustaría que te hagan a ti”, como “cuanto antes terminemos con las situaciones conflictivas mejor” o como “más vale dos heridos que un muerto, que se comparta el gasto, nunca está de más ser generoso que tacaño”. Unas ideas que para saber comportarse ante diferentes situaciones están presididas por lo que ella considera de importancia: “Lo importante es saber situarse en el sitio en el que estemos, con qué gente estemos y saber adaptarse”, en definitiva, dice Carla Royo-Villanova, “lo más importante es respetar al que tengas en frente”.

Sinopsis MR: Los buenos modales y la educación no son cualidades reservadas a unos pocos. Recibir en casa, organizar un cóctel para los amigos, una fiesta infantil de cumpleaños, un banquete de boda o comunión, preparar un currículum profesional, hablar correctamente en público, utilizar el teléfono móvil adecuadamente o cómo comportarse en un almuerzo de negocios son situaciones que requieren un imprescindible buen gusto por los detalles para que el resultado sea un verdadero éxito. La elegancia no es un conjunto de normas rígidas y artificiales que hay que seguir al pie de la letra, es una cualidad natural y espontánea que todos poseemos y que sólo necesitamos saber como potenciar. “La sencillez del saber” estar le da las claves para conseguir que sus relaciones sociales y laborales ganen cordialidad, y gocen de un estilo y distinción exquisitos.

MM. Ramos